Una cultura organizacional fuerte y positiva puede crear grandes ventajas competitivas para las empresas. ¿Cuál es el rol de la tecnología en su desarrollo?

La cultura organizacional es el conjunto de valores, creencias, normas y prácticas que comparten los miembros de una organización, y que influyen en su comportamiento y en sus relaciones tanto internas como externas, con clientes, proveedores y otros actores de su cadena de valor. 

En ese sentido, la cultura organizacional impacta en diversos ámbitos como la identidad, el clima laboral, la capacidad de innovación y adaptación al cambio, el desempeño y la competitividad. Una cultura organizacional fuerte y positiva puede generar ventajas competitivas como la atracción y retención del talento humano, la satisfacción y fidelización de los clientes, la mejora continua de la calidad y la productividad, la diferenciación frente a la competencia y la creación de valor compartido.

Pero, ¿cuál es la mejor manera de desarrollar una cultura organizacional que impulse todas estas ventajas? Si bien no hay una respuesta única ni una fórmula mágica para lograrlo, es indudable que la tecnología es clave para articular las diferentes acciones que pueden llevarse a cabo.

La tecnología como aliado estratégico

La tecnología es un aliado estratégico para gestionar el talento y el desarrollo de los colaboradores en una organización. De hecho, la digitalización de estos procesos supone un cambio sustancial en la cultura organizacional, el estilo de liderazgo de la compañía y el mindset de sus integrantes.

Existen soluciones especialmente diseñadas para facilitar la gestión del capital humano y el desarrollo de un clima laboral más saludable y productivo. En líneas generales, este tipo de soluciones:

• simplifican reunir, registrar, almacenar, analizar y recuperar los datos relacionados con el recurso humano de la empresa;

• facilitan la comunicación, la colaboración y el trabajo en equipo entre los empleados y los líderes;

• permiten implementar modelos de trabajo flexibles y adaptados a las necesidades de cada persona;

• mejoran la motivación, el compromiso y la satisfacción de los trabajadores;

• y fomentan el aprendizaje continuo, la innovación y la creatividad.

Nosotros destacamos especialmente el poder de Talentry, una solución líder en el mercado y utilizada por compañías de todos los sectores e industrias.

Talentry permite a las organizaciones optimizar su capital humano mediante la mejora de los procesos de reclutamiento, capacitación, evaluación y retención de los empleados. Esta herramienta puede impactar en la cultura organizacional al fomentar un ambiente de trabajo positivo, basado en las mejores prácticas empresariales y el desarrollo del potencial de cada colaborador. Así, Talentry contribuye a crear una cultura de alto rendimiento, compromiso e innovación, que se adapta a los cambios y desafíos del mercado.

Se trata de una herramienta central para una estrategia laboral a largo plazo que beneficie tanto a la empresa como a sus trabajadores a través de políticas inteligentes.

Sin fórmulas mágicas

Cada empresa tiene su propia identidad y sus propias necesidades. Por eso, lo importante es definir claramente cuáles son los valores que quieres transmitir e involucrar a todos tus colaboradores en el proceso.

Luego, es cuestión de tiempo. Desarrollar una cultura organizacional positiva no es algo que se logre de un día para otro. Es un trabajo continuo que requiere no solo una herramienta de gestión adecuada, sino también compromiso, paciencia y perseverancia por parte de todos los miembros de la organización.

Como solemos decir en Tesselar, una compañía exitosa ⏤capaz de retener el talento e impulsar la productividad⏤ integra las actitudes y el compromiso de los trabajadores, el respeto, la ética y el profesionalismo. Esta fórmula ⏤que no es mágica⏤ es una vía segura hacia los resultados competitivos y un mejor posicionamiento en el mercado.